Nace un bebé y se crea una nueva familia. Un conjunto de personas que se amaran sobre todas las cosas y que crecerán juntos.
Guarda ese recuerdo tan importante, porque los instantes más bellos de la vida son así, segundos en toda nuestra existencia.
Las sesiones de recién nacidos son muy especiales, ya que fotografiamos al bebe dormido, sonriendo en sueños, sus pequeños piececitos, su piel suave…
Este tipo de fotografía se puede realizar los primeros 15 días del bebe, porque aun mantiene hábitos posturales del embarazo, incluso suele estar más cómodo cuando le recogemos las piernecitas y los brazos sobre su cuerpo, porque le recuerda al interior de su mamá.
No hay tiempo estipulado porque lo importante aquí son ellos y vosotros, que os sintáis cómodos es esencial para que la sesión salga bien y disfrutéis de ella. Es muy normal que la sesión se pare porque el peque tiene hambre, hay que cambiarle o desea estar en brazos de sus papis. Tranquilos, por esa razón, son sesiones de una mañana o una tarde completa.
Podemos hacer las fotos en el estudio o en vuestro hogar, vosotros decidís, ya que muchas familias se sienten más cómodas en su casa en estos primeros días.
Os recomendamos que es importante reservar de uno a dos meses antes, para poder planificar mejor y estar atentos al día de su nacimiento, así lo tendremos todo preparado.